En el México actual, inmerso en un mundo globalizado, la educación tecnológica agropecuaria constituye un factor importante para los sectores productivo y social, al tenor de su objetivo fundamental que constituye ofrecer servicios educativos en los tipos de bachillerato, licenciatura y posgrado para formar técnicos y profesionales, comprometidos con el desarrollo sustentable agropecuario y rural, dotados de una sólida formación técnica y con los más altos valores de la nación mexicana; realizar investigación y generar desarrollos tecnológicos, atendiendo las necesidades y asistencia técnica, aprovechando al máximo la capacidad instalada, con el propósito de contribuir a mejorar la calidad de vida del medio rural.
En este marco, la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria (DGETA) tomando como referencias fundamentales el Programa Nacional de Educación 2006 – 2012y el Programa de Desarrollo de la Educación Tecnológica 2006 -2012, con la participación de la comunidad educativa, elaboró el Programa de Desarrollo de la Educación Tecnológica Agropecuaria 2006- 2012, que contiene el conjunto de políticas que permitirán ofrecer una educación de buena calidad, equitativa y de vanguardia, para contribuir al desarrollo rural integral, equitativa y social juegue un papel determinante en la transformación económica, productiva y social del sector y de las comunidades.
El desarrollo de la educación tecnológica ha sido, y será por ello un proceso formativo de vanguardia. Con connotaciones profundamente transformadoras al estar imbuido con problemas esenciales de subsistencia vitales más que con ejercicios especulativos.
El desarrollo de la educación tecnológica mantiene una posición estratégica dentro del contexto social al estar íntimamente relacionado con los sistemas productivos, de distribución y aprovechamiento de las riquezas con que cuenta una comunidad para lograr sus mantenimientos. Interrelación más evidente en los tiempos actuales en que la generación y aplicación del conocimiento tiene un carácter estratégico en la transformación acelerada de los mismos.
El conocer quiénes somos y con qué riquezas contamos como nación para garantizar e impulsar el desarrollo sustentable adquiere en este proceso importancia fundamental. Los hombres se crecen cuando enfrentan y dan soluciones positivas a los problemas. Para ello hay que aprender a conocer y a actuar.
Específicamente en el Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario No. 123, de Cerritos, San Luis Potosí, dependiendo de la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria, es una institución educativa muy importante para la sociedad sectores sociales y productivos de la región que comprenden los municipios de Cerritos, Villa Juárez y Guadalcazar, San Luis Potosí. Por lo que resulta imperante y necesario promover y difundir los servicios que presta con calidad. La importancia radica en la formación integral de los jóvenes considerando la preparación para continuar los estudios superiores o bien para el trabajo. De esta manera los alumnos egresados tendrán en sus manos la posibilidad de contribuir hacia un desarrollo de la región, del estado y del país con justicia y equidad social.
ANTECEDENTES
La educación tecnológica agropecuaria tiene sus antecedentes en la educación rural mexicana que se originó en los años veinte, como fruto de la Revolución. El servicio que actualmente ofrece, se inició en 1970 al crearse la Dirección General de Educación Tecnológica Agropecuaria. A más de 38 años de existencia, como integrante del Sistema Nacional de Educación Tecnológica, cuenta con una amplia infraestructura física y recursos humanos calificados, distribuidos en cada una de las entidades federativas, atendiendo la demanda social de educación media superior, superior y posgrado, así como la educación no formal y la capacitación para la vida y el trabajo, lo que contribuye al desarrollo integral de los habitantes del medio rural.
La función educativa se orienta a favor de la población rural que se dedica a actividades como la agricultura, la ganadería, la silvicultura y la agroindustria. Los planteles se encuentran ubicados en zonas de alto rezago educativo y social con tecnología tradicional; zonas de menor rezago educativo y social con tecnología intermedia, así como en zonas de mejor nivel educativo con agricultura altamente tecnificada.
Es has el 10 de octubre de 1980 cuando en nuestra región se funda el Centro de Estudios Tecnológicos Agropecuario No. 123 con sede en el municipio de Cerritos, S.L.P. con carácter terminal, ofreciendo las carreras de Técnico profesional agrícola especialista en cultivos básicos e industriales y Técnico profesional pecuario especialista en bovinos en clima templado. En el año de 1981 adquiere su nombre actual Centro de Bachillerato Tecnológico Agropecuario No. 123 con una principal característica de cambio; se ofrece el bachillerato bivalente, que es una doble opción para el estudiante: continuar sus estudios en el nivel superior o integrarse al sector productivo.
Por lo que desde entonces el comportamiento de la matricula se registra de la siguiente manera:
